Descripción
Los Philodendron son arbustos o árboles pequeños, la mayoría de los cuales son capaces de trepar sobre otras plantas, o subir los troncos de otro árbol con la ayuda de raíces aéreas.
Las hojas son generalmente grandes, a menudo lobuladas o hendidas profundamente, y pueden ser más o menos pinnadas. Se presentan alternas en el tallo. El tallo floral se puede encontrar terminal en un vástago, o en una hoja axilar. Frecuentemente son plantas con perfumes fragantes. El color presenta varios tonos de verde, o bien verde jaspeado de blanco; con frecuencia son de color pardo orín o púrpura en el envés.
Las flores son insignificantes, reunidas en una inflorescencia cilíndrica envuelta en una espata en forma de cartucho que puede ser blanca, roja o amarilla.
La floración rara vez se produce en las especies cultivadas en casa, y es muy difícil indicar la época en que florecen, ya que ésta se halla condicionada por muchos factores, tales como edad de la planta, grado de luz y calor, etcétera.
Frutos en forma de baya carnosa; maduran sólo en invernadero o en los países de origen.
Se utiliza como planta ornamental de interior. Necesita muy buena luz, pero no el sol directo. Se cultiva en terreno de tipo universal o formado por 1/4 de tierra de jardín mezclada con 2/4 de tierra de hojas o tierra de brezo y 1/4 de arena. El trasplante se hace en otoño o en primavera.
Se multiplica por esqueje, implantando los trozos de tallo en tierra arenosa, a la sombra y mejor debajo de una campana de plástico; también resulta fácil multiplicarlos cortando la «cabeza» de la planta, cuando la parte inferior del tallo aparece sin hojas, y plantándola en tierra arenosa; los filodendros también se multiplican con celeridad mediante hidrocultivo.
Todas las partes de la planta son venenosas, debido a la presencia de oxalato cálcico en forma de cristales.